REMODELACIÓN DE CALLE SAN RAMON Y PASAJE FIGARI

Miraflores, Lima, Perú.

Área de trabajo: 3,200m2 aprox. 

SEGUNDO PUESTO, Concurso nacional de anteproyectos.

Municipalidad distrital de Miraflores, 2019.

 

Se ha escrito sobre Lima como ciudad Fragmentada, o hecha de fragmentos, no solo físicos, Urbanos, o Arquitectónicos, si no, sobre todo sociales. Es tal vez el orden correcto, los fragmentos sociales se materializan día a día en la Ciudad. Estas partes, o piezas sueltas en distintos órdenes y en distintas escalas, producen, y dejan de producir, innumerables y conocidas dinámicas que deterioran la percepción de los espacios públicos y así la habitabilidad de la Ciudad.

Desde estas circunstancias se generan las ideas rectoras de nuestra propuesta.

CONECTAR. Pensamos que aprovechar las sinergias de proyectos aislados cercanos a los pasajes San Ramon y Figari es fundamental para el éxito del proyecto. Comprender el área de intervención como parte del Parque Kennedy, e inclusive como parte del eje peatonal de la avenida Larco conectándolo a través del excelente, pero aislado trabajo de peatonalización de Diez Canseco. Y si ampliamos la mirada, cambiamos de escala y somos más ambiciosos pues este hecho podría terminar de articular un sistema de espacios públicos a partir de fragmentos en el que fácilmente, y con pequeños proyectos, se podría integrar Larco Mar, la Avenida Pardo y La avenida Arequipa, con los ya conocidos beneficios para los sistemas de movilidad urbana sostenible, dando preferencia al peatonal. El principal beneficio para el proyecto en los pasajes San Ramon y Figari sería el de tener la posibilidad de diversificar el tipo de usuario de este espacio público.

Para esto proponemos conectar a nivel peatonal al parque Kennedy con un crucero peatonal elevando en el ingreso a la calle San Ramon, y otro en los cruces de la avenida Diagonal con la Calle Berlín, dándole relevancia al ingreso por el Pasaje Figari. Como sugerencia proponemos rediseñar los tramos de vereda del parque Kennedy que conectan Diez Canseco con la calle San Ramon, ampliando su sección para que la lectura sea mas clara, y el tramo de vereda en diagonal del Parque, que conecta la esquina de Schell con pasaje los Pinos, ampliando también su sección para hacer más clara la conexión.

ORDENAR. A los espacios desconectados se suman las Arquitecturas individuales, las que crean un ambiente del desorden, suman ruido al ruido, deterioran el perfil urbano, no hay una lectura clara de cual es el espacio físico, de los límites y posibilidades de desarrollo de actividades entre lo público y lo privado. Para ello proponemos un elemento que va completando las fachadas hacia la calle y el pasaje, una estructura metálica ligera y desmontable que como resultado va dando forma al espacio público, un elemento unificador que respeta la diversidad de las fachadas en color y forma, siendo la estructura metálica el elemento unificador. Un gran contenedor cuyo espacio flexible puede albergar distintas configuraciones según sea el caso. Si antes teníamos las arquitecturas de los locales ocupando el espacio público, lo privado sobre lo público, ahora tendremos la arquitectura de lo Público. Lo publico sobre lo privado, la Ciudad para la gente.

Bajando la escala, estructuramos el espacio en planta, desde los arboles existentes, desde ahí proponemos mobiliario claro y de fácil lectura, que permite estructurar pequeños espacios de relación en distintas escalas. De tal manera que no se entorpezca el uso del suelo para diversas artísticas o culturales.

Es importante recuperar el frente de vereda hacia la avenida Larco, en donde hoy están los paraderos de buses, lo que torna este espacio - que es el ingreso real al proyecto - en un lugar agresivo para el peatón, en desmedro de estos espacios que pretendemos mejorar y del comercio cercano. Para ello sugerimos hacer las gestiones necesarias para mover el paradero a la distancia conveniente, que podría estar a unos 120 metros antes en dirección al ovalo. Con esto reocuparíamos la vocación peatonal de este espacio, en el que proponemos un trabajo similar al de la calle y el pasaje.

En la esquina de la calle Berlín y Diagonal proponemos un diseño de mobiliario, arborización y piso que reciba al visitante que viene desde Schell y a la vez define un espacio que ya esta marcado por las edificaciones existentes, con el trabajo de arborización terminamos de contener este espacio, que por su tamaño, con mucho potencial para el desarrollo de pequeñas ferias o exposiciones de arte, ampliando la mirada, este espacio como todo el espacio del proyecto podría incluirse como parte de las actividades que se desarrollan en el Parque Kennedy, estructurando así un sistema de actividad cultural en toda la zona.

CONTENER. El elemento metálico desmontable se convierte en un gran contenedor de espacio público, un espacio con carácter, pero muy flexible a la vez, ordena y completa las fachadas, marca las propiedades dándoles identidad, marca también el límite del uso público y del uso privado sin entorpecer alguna relación que podría establecerse entre el mobiliario urbano y el privado. En este nuevo espacio, referente en el distrito, se pueden desarrollar desde actividades lúdicas marcadas en los pisos, actividades culturales variadas, ser simplemente el espacio donde se puede encontrar algún lugar para sacar el almuerzo traído de casa en el tiempo libre de la oficina, y hasta la celebración de los partidos de futbol, todo esto en un equilibrado beneficio para los ciudadanos y el comercio cercano.